
Así lo definió la Alcaldía de la capital de Nariño en el decreto 0391. El objetivo es impedir que los niños salgan a exponerse en esta fecha, tanto en el día como en la noche.
“Es un llamado a la responsabilidad por nuestra vida y nuestra salud”, aseguró el secretario de Gobierno, Carlos Bastidas Torres, pues la intención es preservar el bienestar de niños, niñas y núcleos familiares. El toque de queda y ley seca irán desde las 5:00 p.m. del sábado 31 de octubre, hasta las 4:00 a.m. del domingo 1 de noviembre.
Se pide a los padres de familia responsabilidad para prevenir al máximo la salida de los niños y no generar aglomeraciones en espacios públicos y lugares residenciales, ni tampoco el expendio de bebidas embriagantes. Esto será verificado por todas las dependencias de la Alcaldía que tienen competencias y funciones para observar el acatamiento o violación de las mismas.
Habrá comparendo a quienes incumplan y tendrá un valor de $ 1’040.000 pesos.