
Esta vez el consejo de seguridad lo presidió el nuevo Ministro de Defensa, Diego Molano. Se confirmó que fueron asesinadas 11 personas el fin de semana en zona rural de Tumaco. Hay una realidad que no se puede ocultar ni aceptar, las fuerzas del estado no tienen el control del territorio, lo que deja expuesta a la población al accionar de grupos ilegales. Que unos muertos son de población civil y otros pertenecen a grupos armados, como lo afirma el Ministro de Defensa, sigue siendo la confirmación que en esa zona de Nariño la presencia de la fuerza pública de Colombia no logra neutralizar la acción criminal de esos grupos.
La Alcaldesa de Tumaco, Maria Emilsen Ángulo explica la situación como un tema estructural, además diciendo que mientras la comunidad siga aceptando la presencia de cultivos ilícitos en el territorio va ser muy difícil evitar que situaciones como éstas se sigan presentando. Ahora la comunidad salió a deber, el énfasis deberían colocarlo las autoridades en la construcción cierta de alternativas de ingresos y condiciones de vida digna para la población.
Aquí hay otra cruel realidad, se quiere acabar con el negocio del narcotráfico sin inversión social, lo que vuelve mentira e imposible la intención. Cuando un gobierno va a gestionar los billones que se requiere para adecuar el territorio y construir la comunidad que pueda vivir sin tener que morir por el tráfico de drogas ilícitas, es la pregunta sin respuesta.
El gobernador, Jhon Rojas habla de inversión social, falta precisar un plan con todo lo que se requiere para salvar una parte tan importante del territorio nariñense de la criminalidad. Porque en las intervenciones pareciera que se está pidiendo obritas y ya se sabe que el presidente Duque ofrece centros de zarandéate, como en Samaniego.
La inversión debería calcularse en lo que cuesta un plan integral de vida para costa pacífica. Que eso es mucho dinero, sí, eso es lo que vale que no maten a nuestra gente, que miles de jóvenes no busquen la comida y la existencia en grupos criminales, que las familias no obtengan los ingresos para sobrevivir de la economía ilegal, que la paz sea real.
Territorios en paz y comunidades para vida sólo se pueden construir con inversiones extraordinarias que pasan de lejos por las obritas con que estos gobiernos quieren cambiar las cosas para que todo se mantenga igual.
Molano hizo el recuento de los muertos y dió los alias de los que corresponden a grupos delictivos: “El pasado sábado se hallaron dos cuerpos sin vida en el corregimiento de Caunapi, este hecho ya tiene noticia criminal. Así mismo, se halló un cuerpo sin vida en la vereda Villarica”, señalando que ninguno ha sido identificado.
Posteriormente, “el domingo 21 de febrero fueron hallados tres cuerpos en el corregimiento de Llorente, mientras que en la vereda Puerto Rico se encuentran cinco cuerpos sin vida, a los cuales no pudieron ejecutársele los actos urgentes por parte de las autoridades”.
Estos últimos corresponden a alías ‘Daniel’, ‘Liso’, ‘Checheno’, ‘Menor’ y ‘Laiza’, todos pertenecientes a la banda de ‘Oliver Sinisterra’. Adicionalmente, se presume que en este momento hay otros cuatro cuerpos desaparecidos, incluyendo el de alias ‘El Enano’, “encargado de la seguridad de alias ‘El Gringo’, cabecilla del Oliver Sinisterra”.
A esto le sigue el ofrecimiento de recompensas, el viejo estilo del oeste.
Carlos Sánchez