
Los indígenas de la Minga se quedaron en el Palacio de los Deportes en Bogotá durante cuatro días, y al partir dejaron completamente limpio el lugar.
Este lugar fue el refugio de los miles de indígenas que viajaron desde el departamento del Cauca hacia la capital del país, con el fin de manifestarse tras los hechos de violencia que se han presenciado en sus territorios.
Fue desde la Alcaldía de Bogotá que se les ofreció este recinto deportivo para que se pudiesen hospedar mientras intentaban concretar una reunión con el actual presidente de Colombia, Iván Duque, que finalmente, como ya se veía venir, este encuentro nunca se dio.
La estadía en la capital, en el Palacio de los Deportes, se dio hasta el día miércoles, cuando la minga se unió al Paro Nacional que se desarrolló en todo el país. Antes de unirse con los manifestantes, el pueblo de la minga dejó el lugar impecable, dando así un ejemplo de buena convivencia y de que se puede manifestar con respeto y cultura ciudadana y cívica.